-
Debate
-
Efectivamente, lo que está ocurriendo en España al final habría de trascender nuestras fronteras. Que en un Estado de Derecho de la Unión Europea se pisotee de forma flagrante y reiterada la legalidad, la ética y los derechos fundamentales protegidos no sólo en la Constitución sino en la propia declaración universal de derechos humanos, no es algo tan irrelevante que pueda pasar desapercibido. Desde hace tiempo me consta que hay consulados que advierten a sus nacionales para que tengan precaución a la hora de mantener, en nuestro país, cualquier relación con mujer, y no digamos lo de tener sexo, ya que, si por mano del demonio resulta que la susodicha está adiestrada en ideología de género, puede hacer que termine con sus huesos en una celda tras ser denunciado por despecho, afán lucrativo o por simple ajuste al guión del deporte nacional de la caza del varón, heterosexual de raza caucásica, preferentemente.De seguir así, entre los antisistema radicales de extrema izquierda que ahora persiguen y acosan el turismo, sobre todo ese tradicional de familias con hijos, que es que más se amedrenta ante sus vandálicos actos, y la persecución al turismo senior masculino, aquí en España solo van a terminar viniendo, con el permiso de la CUP y BILDU, turistas gays, porque en eso sí, nos hemos convertido en potencia mundial. Van a terminar huyendo hasta los futbolistas; de hecho algunos, incluso de aquí, ya lo hacen.Porque en España nos estamos vendiendo como el mascarón de proa, el buque insignia de esa ideología que fomenta la más cruel, ruin e ineficaz de las discriminaciones. Pactos de Estado, miles de millones de euros invertidos para conseguir el objetivo oficial de acabar con la violencia machista. Esa es la fachada, la noble coartada con la que se disfraza el verdadero fin que se oculta. Nadie defiende, de hecho, que se produzcan situaciones de violencia sobre las mujeres. Casi nadie, a no ser por la manipulación mediática, aceptaría que se produzca cualquier tipo de violencia en el ámbito familiar. Pero claro, al margen de fines electorales y económicos, que se plasman en subvenciones y ayudas de todo tipo, lo que no trasciende es que uno de los objetivos principales, es la eliminación de la figura paterna en la crianza de nuestros hijos.Primero la metástasis de ese cáncer ha calado en una clase política devaluada, mediocre y podrida, fácil caldo de cultivo para que se desarrollen las células malignas que invaden los tejidos cada vez menos sanos de un poder legislativo paupérrimo. A continuación, han invadido otras instituciones, y cómo no, se han infiltrado en el poder judicial, empezando por su órgano de gobierno.Y dado que todavía hay normas, procedimientos y tribunales que no han sucumbido, cuando todavía hay tratados y reglamentos internacionales que obligan a la restitución de los menores ilegalmente sustraídos, resulta que en nuestro país hay quienes acuden al argumento de rebelarse al cumplimiento de la ley. Siempre la socorrida excusa victimista del maltrato: en Cataluña la de España nos explota y maltrata; cuando es una madre quien ha sido la infractora, la de que el padre me maltrata. Da igual si es verdad o mentira, solo diciéndolo encuentra cooperación necesaria, que es una de la formas de la autoría en la comisión de delitos, en ignorantes, resentidas y/u oportunistas que viven de la industria de género, y en algunos políticos títere que se han convertido en zombis de quienes se ríen de la legalidad.Solo espero que haya jueces que se den cuenta a tiempo de que se encuentra en juego la solvencia y el respeto que merece el poder judicial. Yo me di cuenta de ello hace ya tiempo, un tiempo que me está dando la razón. En el caso de Juana Rivas no es ella, quizás una persona desequilibrada, la mayor responsable del daño que se les está causando a dos pequeños, privados injustamente de todo contacto con su padre, sino quienes la están llevando por un camino de ilegalidad y desobediencia. Quienes, parece ser, que desconocen que también ha habido casos de madres que han sido capaces de acabar con sus hijos, con tal de que un padre no se salga con la suya. Existe, pues, riesgo para la integridad de los niños, un peligro que proviene tan solo por parte de quien los mantiene indebidamente retenidos, y no de un padre que lucha por recuperarlos. Mas para esas brujas de género, todos los padres somos unos maltratadores, una especie a extinguir. Muchos jueces, hasta los de planteamientos de izquierda, lo saben. Está en juego su credibilidad, y no sólo estamos ante la palestra del ridículo nacional sino incluso ante la de un ridículo a nivel internacional, a no ser que se adopten las medidas precisas y necesarias para poner en busca y captura a una delincuente y persiguiendo también a las personas que han cooperado en la comisión de ese delito de sustracción de menores. La Justicia no puede quedar al servicio de fines ideológicos, y menos, si cabe, cuando se experimenta con la vida e interés de unos niños. Los experimentos con gaseosa.Y recuerden estas palabras, no será este ni el primero ni el último caso en el que el poder judicial puede hacer el ridículo por quedar sometido a las directrices de la dictadura de género, saltándose la legalidad con tal de que se impongan sus planteamientos, favoreciendo a quienes se pliegan y encajan en sus dogmas, y persiguiendo a los que consideran y declaran como sus enemigos. Al menos en Cataluña a los delincuentes se les enseñan los dientes, aquí a las delincuentes se les exhiben, pero en una aterciopelada sonrisa.
FRANCISCO SERRANO CASTRO
Magistrado | Abogado | locutor y director de 'Justicia Social' en RSXXI
Redactor y director del periódico digital 'XYZ'@despachoserranoabogados.com
@xyzdiario.com/author/francisco-serrano
@radiosapiens.es/category/justicia-social-2
@sencillezyorden.es/users/francisco-serrano-castro/favoritesLIBRO ESTRELLA:
@sencillezyorden.es/libros-estrella/la-dictadura-de-genero
Mostrando 0 respuestas a los debates
Mostrando 0 respuestas a los debates
- Debes estar registrado para responder a este debate.